lunes, 9 de junio de 2008

Nuevos horizontes

Llevo cierto tiempo sin escribir aquí. Puede ser porque he estado entretenido leyendo. Intento revivir mi alemán, y el goce depende del tipo de texto. Al ver "Huída y fin de Joseph Roth", de Soma Morgenstern, en castellano, la localicé en el original alemán y he disfrutado mucho leyéndola. Claro que hay algún detalle que se me habrá escapado, para al ser un libro de memorias, es más fácil captarlo que una novela. También he acabado "Der Untergeher", de Thomas Bernhard (en español "El malogrado")- me ha gustado, con un estilo muy propio y bastante accesible (frente a lo que yo me temía). Ahora me he puesto con "Das Spinnennetz" ("La tela de araña") de Joseph Roth, su primera novela, y me está costando cierto esfuerzo.
Sigo ampliando mi biblioteca. En Moscú he comprado "Doctor Zhivago" de Pasternak y "Relatos de Kolimá" de Shalamov. Por no hablar de los DVDs de clásicos del cine ruso que voy acumulando. Ni que fuese un oso a la espera del largo invierno.
Un día de estos revisaré la lista de lo leído en los tres últimos años, a ver qué conclusiones puedo sacar. Claro que éstas, en su mayoría, las conozco de antemano: mis gustos y aficiones prácticamente son los mismos de hace veinte años. Pero todo evoluciona, se enriquece, aparecen nuevos matices, es posible avanzar, abrir horizontes nuevos.
He comprado hace poco un tocadiscos con conexión USB al ordenador, y con software que permité convertir las pistas del vinilo al formato digital. Para mí, toda una revolución (anunciada desde hace años). Hará falta paciencia para digitalizar mi colección, pero merece la pena.

viernes, 16 de mayo de 2008

Grossman

Estoy días estoy leyendo "Vse techet" (Todo fluye), de Vasili Grossman, que tanto eco tuvo en España el año pasado cuando se publicó su "Vida y destino". "Vse techet" es bastante más corta que "Vida y destino", pero igualmente interesante. Se diferencia en que tiene más reflexiones aún sobre la reciente historia de Rusia, desde la Revolución hasta el terror de los años treinta. Incluye descripciones sobrecogedoras del hambre en Ucrania (provocada por el poder estaliniano), la suerte de los kulaks, etc...Su personaje central es Iván Grigórievich, un hombre que recupera la libertad tras décadas en el Gulag. Si "Vida y destino" viene a explicar que tanto nazismo como estalinismo eran regímenes similarmente opresores de la libertad humana, esta novela indaga aún más en el terror estaliniano y sus raíces. Podría leerse, casi, como una especie de manual de historia del a Rusia de la primera mitad del siglo veinte.
De muchos de los temas que toca Grossman la verdad sólo empezó a conocerse sin tapujos a partir de los años ochenta. Él murió en los sesenta, por lo que supongo que en gran medida a lo largo de su vida habló con personas que vivieron esas terribles experiencias de cerca.
No sé si el libro se traducirá al español. Puede que sí, dado el éxito de "Vida y destino". En francés ya está disponible.

miércoles, 30 de abril de 2008

Bartók

Béla Bartók, foto del Instituto de Musicología de la Academia Húngara de Ciencias
Hace tiempo que pienso que hay una obra que expresa, en el poco tiempo que dura (unos seis minutos), todo lo que yo he encontrado en la música: las "Danzas rumanas" de Béla Bartók. Quiero decir que me basta escuchar esas danzas, tal y como las compuso aquél gran hombre, para captar todo aquello que nos puede dar la música, y que no podemos explicar con palabras. Si tuviese que elegir sólo una obra para poder escuchar el resto de mi vida, sería ésta.

Hace más de quince años que dejé de escuchar música clásica con regularidad. Si vuelvo a ella, muchas veces, es por encontrar alguna conexión con la música que escucho ahora. Pero las danzas rumanas de Bartók las conozco desde hace más de veinte años, de uno de los primeros cds que compró mi padre. Luego, en los noventa, encontré un disco de vinilo de un grupo húngaro que recupera las danzas originales, aquellas que Bartók encontró en Transilvania, en sus expediciones etnomusicológicas, y luego arregló y adaptó para orquesta.
Tras una gran carrera como compositor, cerca del final de su vida, exiliado en Norteamérica, Béla Bartók volvió a la etnomusicología, pues se dedicó a transcribir grabaciones de cantos épicos de la Yugoslavia de los años treinta.
Pienso que es uno de los grandes europeos del siglo XX, humanista, cultivado y antifascista. Un gran hombre.

martes, 22 de abril de 2008

Hasim 2

Ahora sí he podido sacar a Hasim Muharemovic. La portada es de un disco sencillo de Semir (sello "Diskoton", años 70 o principios de los ochenta), y menciona una bella canción bosnia ("Il´je vedro, il´oblacno", que se puede traducir como "¿Está despejado, o está nuboso?"). Ni la ropa ni el instrumento son pose: Hasim sigue apareciendo así ante el público en sus conciertos.

Sólo yo sé cuánto tiempo me costó encontrar grabaciones de éste tipo de música tras escuchar aquella primera canción en el CD francés que mencionaba el día pasado...y cómo hay estilos musicales que no se aprecian en su justo valor al principio, pues sólo el tiempo te ayuda a descubrir, para tí mismo, su belleza discreta pero incuestionable.

domingo, 20 de abril de 2008

Mihail

En 1941 entró en vigor una ley en Rumanía por la que se despojaba de propiedades inmobiliarias a los judíos. Paralelamente, se imponía a los inquilinos judíos unos alquileres sensiblemente más caros que para el resto. Todo ello de modo oficial. Mihail Sebastian cuenta en su Diario que esta medida le golpeó mucho más que las salvajadas de los extremistas callejeros, pues era una medida del propio Estado rumano y nadie podía ya encontrar amparo en ese ordenamiento jurídico. Sebastian buscaba alivio en algunas victorias aliadas en lejanos frentes africanos, y su única evasión era la música clásica radiada. Su consigna era aguantar, pues toda esa locura pasaría algún día. ¿Cómo aguantaríamos nosotros un empeoramiento súbito y grave de nuestras circunstancias? Con todo lo que sabemos y hemos leído del siglo XX, ¿nos dejaríamos llevar por la locura colectiva, o sabríamos mantener la lucidez? Shalamov lo dice claramente: en circunstancias extremas, como las del Gulag, el intelectual es el primero en derrumbarse y deshumanizarse. Salvo algunas excepciones, pues (el propio Shalamov, Sebastian, y otros), el intelectual se vale de sus conocimientos y reflexiones en circunstancias más o menos normales de vida (y muy seguramente éstos le ayudan y dan fuerza), pero en el infierno es el primero en quemarse.

viernes, 18 de abril de 2008

Hasim

Si tenía que poner una primera imagen, era ésta: uno de los mejores músicos de Bosnia, el sazlija Hasim Muharemovic, nacido en 1937. Lo conocí en persona hace un par de años, pero escuché su voz por primera vez hace no menos de dieciséis años, en un CD de música tradicional de la ex-Yugoslavia editado en Francia. Sólo aparecía una melodía de Bosnia, sin identificar correctamente su título, y sin información sobre el intérprete. Supe sólo en 2006 que era Hasim, cantando una antigua sevdalinka. Cuando le ví en Sarajevo, primero escuchó la canción su hijo, y nada más escuchar las primeras notas del instrumento, enseguida dijo, "ése es mi padre". Ni qué decir tiene que Hasim no tenía ni idea de que había aparecido en un CD fuera de su país. A saber de dónde sacaron aquellos franceses la grabación.
Creo que la sevdalinka, sobre todo acompañada por el instrumento de cuerdas saz, es uno de los patrimonios musicales más interesantes de toda Europa. Y Hasim es uno de los grandes sazlija, con un rico repertorio. Tengo confianza en que ésta tradición se mantenga en Bosnia, pues es una de las grandes aportaciones de aquél país a la cultura universal. Mi amigo Semir Vranic, originario de Trebinje (Hercegovina), de donde tuvo que huir en 1992, tiene un blog dedicado a la sevdalinka (sevdalinke.blogspot.com), donde vuelca documentos sobre esta tradición, localizados en bibliotecas de diferentes ciudades europeas. Semir es doctor, especializado en patología, y actualmente vive en Sarajevo. Es el primer "blogger" al que debo mencionar, desde luego...
Mi inexperiencia con esto del blog no me permite, por ahora, colocar aquí la foto del disco de Hasim. Espero arreglar el problema, sino menudo "blogger" más poco serio estaría hecho...

jueves, 17 de abril de 2008

Primer día

Ya era siendo hora de tener un blog. Algo para asomarse al mundo. ¿Alguien tendrá la paciencia de leerme?
Yo, por mi parte, estos días leo el diario de Mihail Sebastian; antesdeayer también empecé (por primera vez) a leer a Thomas Bernhard. Leo, entre otras cosas, para poder escribir, cosa que aún no hago. También leo, desde luego, para no perder la práctica de ciertos idiomas. Pero leo sobre todo para poder saber y aprender, para mejorar, para tener fuerza...